Llevo días planteándome borrar la última entrada.
Ha sido...sangrienta, furibunda y cruel.
Pero no merece la pena.
Ahora me limpiaré la sangre del rostro, echaré mi ropa a lavar y seguiré mi camino.
Y, cuando tenga hambre, dentro de un tiempo, ya destriparé a quien me moleste en ese momento.
Mi sed (de venganza) quedó saciada con el último punto de la entrada anterior.
Yo soy así.
Me decepciono. "Lloro" (sin llorar). Me enfado. Asesino a alguien. Y me calmo hasta dejarlo pasar.
Y, con la sangre mezclada con el agua de ducha y el jabón, desaparece TODO lo demás.
Besos de menta
Porque no sirve de nada arrepentirme, porque no es cierto.
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