Nueva historia [otra más]

Hoy me he despertado, como otras tantas veces, con ganas de todo y de nada. Sonriendo. Sonriendo por ayer, por mis sueños y por los recuerdos.

Era la una de la madrugada del viernes y oía su voz al otro lado del teléfono. 

Yo, tumbada bocarriba sobre la cama, y con los ojos brillantes.

Risas. Confesiones. Anécdotas.

Quejas de mi hermana al otro lado de la puerta de mi cuarto.

-¿Con quién hablas? Ya es tarde...

-Ya voy - ceño fruncido.

Su padre recreando una escena parecida, él también debía colgar. Despedida.

"Hasta mañana. Buenas noches. Descansa"

Y me acurruqué bajo las sábanas, para luego estirar mucho los brazos y las piernas ocupando todo el espacio de mi gran cama. Pienso en él, en su pequeña cama, y en lo vacía que está la mía.

Me sonrojo. Cierro los ojos y me recreo en esa ilusión.

Suena el despertador a las ocho y media, aproximadamente. Después de haberse repetido unas veinte veces, me levanto. Miro el móvil. Un mensaje. Él, apremiándome para vernos en la facultad. Dicho y hecho. Me visto a toda prisa, un vaso de leche caliente, me arreglo un poco y fuera. Camino de la parada de bus. 

Llego a la cafetería y me lo encuentro con una amiga nuestra. Saludos, comentarios. 

Y BLA BLA BLA BLA BLA BLA BLA BLA BLA

Muchas cosas, ninguna relevante. Un momento chof por mi parte, sin razón (algunas chicas me entenderán). Él se preocupa. ¡Qué mono! Mimos, muchos mimos. 

A casa a comer. Un rato de videollamada haciendo el idiota con amigos. 

Las seis menos cuarto, minuto arriba, minuto abajo. Llaman a la puerta.

Lista para una tarde de serie. Death Note, frikada. Soy friki, y no puedo estar más orgullosa.

Pero antes, mientras mi hermana no se iba, nos pusimos a ver videos, fotos. Descubrimiento. Compartimos detalles muy extraños de la infancia. Risas. Incredulidad.

Mi hermana se va. Serie en la tele. Abrazaditos en el sofá. Me encanta. Empiezo a quedarme dormida, me sentía tan agusto entre sus brazos. Supongo que me siento protegida, y nada importa, porque nada puede hacerme daño.

Llega mi hermana. Decido descansar un poco de las series. Guitar Hero. ¡Me engañó! No puede ser que nunca haya jugado antes. Mi hermana se nos une. 

-¿Te apetece quedarte a cenar? - ya eran las diez pasadas.

-Si no molesto...

-Creo que haré unas pizzas.

Fui a la cocina, me puse a picar cebolla, a preparar las pizzas...Me sorprendé con "las manos en la masa" y no se me ocurre otra cosa que decir: "apesto a cebolla". "Me encanta la cebolla" dijo mientras me besaba.

Mi hermana hacía zapping. Nada interesante. "Podemos ver Gru, que él también quiere verla" propongo a raíz de un comentario que había hecho mi hermana al mediodía. La ponemos mientras cenamos. Cuando terminamos, él y yo nos acurrucamos en el sofá grande, y mi hermana se recuesta en el otro.  Vuelvo a adormilarme. "¿Te estás quedando dormida?", niego con la cabeza, pero no engaño a nadie. Más risas. La una de la madrugada del sábado. Termina la peli. 

"Bueno, yo me tengo que ir". Le acompaño a la puerta. Nos besamos. "Buenas noches"

Mensaje nuevo:

" Gracias por la tarde de hoy, lo he pasado genial. Dile a tu hermana que gracias, y que perdon por las molestias. Descansa mucho. "

"Qué mono"

Y duermo...duermo en el sillón en el que, hasta hacía unos minutos estabamos los dos. Y sonrío.

Besos de menta