Delirios

El silencio
ausencia de palabras,
latidos, 
respiración, 
de repente, 
un suspiro

  ¿qué ocurre? 

Siento que hay tanto que decir y, a la vez,
tan pocas palabras para expresarlo. 



 Me sorprendo pensando, olvidando mi entorno, desconectando, dejándome llevar por el hilo de mis pensamientos, y descubró que lo que en el fondo me importa no es el silencio en si mismo...son las miradas que lo dicen todo y no dicen nada, unos ojos opacos, que en el pasado eran transparentes. 

¿Cuándo dejé de ver através de ti?

¿En qué momento la distancia que nos separa se convirtió en un avismo?

Temo perderte, quiero  abrazarte, pero siento un escalofrío cada vez que la idea atraviesa mi mente.

Tantas veces antes me costó decidir qué hacer, cómo actuar, y ahora que parezco tenerlo claro, mi cuerpo no quiere responder a los impulsos de la razón.

Noto tu mirada através de la cortina de mi melena, que de algún modo me esconde. 

Miras y no dices nada, sientes y pero no hablas. 

La confusión nos envuelve, todo parece moverse a un ritmo frenético, y tú permaneces ahí, de manera estática, mientras el tiempo avanza, y las agujas del reloj siguen su curso.

El sol aparece entre las nubes, sentimos el calor en la piel, automática y simultanéamente miramos al cielo, y con la cabeza alzada cerramos los ojos. 

¿Eres real? ¿O eres mi reflejo hecho materia? 

Cuando aquello que te rodea te parece caótico, considéralo un reflejo de tu propio interior